
Espacios de vida y recreo con gran valor paisajístico, los ríos son también una compleja solución acuosa de contaminantes con origen en industrias como la farmacéutica. Un estudio publicado en febrero de 2022 analizó las aguas de 258 cursos fluviales en un centenar de países y encontró en ellas restos de todo tipo de principios activos —antidepresivos, antibióticos…— con gran impacto sobre el medio ambiente. El Manzanares, el río que cruza Madrid, fue calificado entonces como el más contaminado por fármacos de toda Europa.
